¿Por qué elegí este programa de especialidad?, ¿cuál ha sido mi experiencia como residente?, fueron parte de las inquietudes que respondieron los médicos y médicas participantes de este Webinar “Hacia la Residencia en Medicina Familiar”- 2022 organizado por el grupo de Trabajo Waynakay de la Sociedad Chilena de Medicina Familiar.
La Jornada que se realizó el 24 de octubre de 2022, contempló presentaciones de residentes pertenecientes a distintas universidades del país que imparten la especialidad de Medicina Familiar, tales como la Universidad de Valparaíso, Universidad de Chile, Universidad Austral de Chile y Universidad de Los Andes. Además, de la Pontificia Universidad Católica de Chile, Universidad de La Frontera y la Universidad Diego Portales.
Al inicio del encuentro, el director de la Sociedad Chilena de Medicina Familiar, y representante SOCHIMEF en Waynakay, Dr. Patricio Thieme, señaló que “el objetivo de esta Jornada es que a partir de la experiencia de residentes de distintas universidades podamos brindar orientación a las personas que están interesados en esta especialidad”.
Uno de ellos, el Dr. Javier Espinal, residente de tercer año de Medicina Familiar de la Universidad de Valparaíso, comentó que el Programa de Medicina Familiar se inició en el año 1996, 147 profesionales han cursado la especialidad hasta la fecha, y 32 son residentes en la actualidad. Destacó, además, la instalación de una comisión de innovación curricular donde participan residentes y docentes. Sobre su experiencia, el Dr. Espinal dijo que hacer la residencia en Medicina Familiar es “atreverse a pensar distinto, abandonar esa concepción más biomédica de la medicina y abrazar la integralidad. Se puede entregar una atención de salud más integral en donde los equipos de salud estén involucrados, la comunidad se involucre y los usuarios se involucren”, concluyó.
Por su parte, el Dr. Alejandro Villalobos, residente de Medicina Familiar de la Universidad de Chile, junto con destacar que éste es el primer programa de formación de la especialidad del país, agregó que en la actualidad hay 39 residentes. Respecto su propia experiencia, ya en tercer año, el Dr. Villalobos recalcó las ventajas de la formación como MF, como la “integralidad de la disciplina, constatar la importancia de tener una APS fortalecida, su enfoque social y participativo, además de la mejora continua”.
Desde la Universidad Austral de Chile participaron el Dr. Diego Fernández y el Dr. Marcelo Hernández. El primero comentó que la UACH tuvo su primera promoción de especialistas en el año 1996, para luego seguir una lógica de semilleros, pasar al Servicio de Salud de Osorno, y luego retomar el programa de formación en el año 2019. Sobre su paso como residente relevó que en la formación “el enfoque sistémico es fundamental, las mejora continua y acercamiento con docentes”. Por su parte, respecto de su experiencia, el Dr. Hernández manifestó que “nos llamó la atención las competencias y habilidades que se logran desarrollar a través de la formación como Médico Familiar. El trabajar con las familias nos da una impronta de continuidad, de poder llenarnos de la historicidad de la comunidad de las familias y eso en realidad hace que nuestra aproximación hacia estimular los recursos y herramientas que queremos, sea gigantesca”.
En la Pontificia Universidad Católica de Chile actualmente son 63 los residentes en ambas menciones (niños y adultos). Al respecto, la Dra. Yanara Durán, destacó el Programa Áncora y el programa de Bienestar para autocuidado de los residentes de dicha Universidad. La Dra. Javiera Brierley enfatizó como una ventaja del Programa MF en la PUC que “ponen al becado en el centro de la docencia”. Mientras que la Dra. Tatiana Pescio señaló que hay “bastante capacidad de retroalimentación de las experiencias (…). Si bien no me gusta la división de las menciones, debo reconocer la rigurosidad en la formación de pediatría ambulatoria, lo que es una ventaja en el programa”.
De la Universidad de Los Andes, la Dra. Catalina García, informó que éste es el primer año del programa de Medicina Familiar y subrayó el “enfoque en persona mayor que se le dio como mención, ya que como la población chilena está envejeciendo, gran parte de la atención en APS es a la población mayor”. Son tres los cupos anuales para la especialidad y uno de los beneficios en el curso teórico es la incorporación del Diplomado de Atención Médica del Adulto Mayor y el Diplomado de Salud Familiar y Comunitaria.
La Dra. Fabiola Silva, del Programa MF de la Universidad de la Frontera, acotó que la especialidad existe desde el año 1994 y hoy cuenta con 28 becados. Agregó que “el eje característico de nuestra Universidad es la interculturalidad, donde se mantiene la vinculación con visitas a los centros de salud, reforzar y mantener a lo largo de la beca lo comunitario, la interculturalidad y que ese becario deje un aporte. Los especialistas de otras ramas nos han reconocido el aporte de nuestros becados”.
De la Universidad Diego Portales, la Dra. Paulina Velásquez contó su experiencia en este primer año de desarrollo de Programa de MF que cuenta con 9 residentes y que según destacó, “los docentes son todos MF y está pensada por Médicos de Familia, lo que ha sido para mí muy grato. El sello distintivo es que incluye el último semestre el desarrollo del área de interés, como Familia y Comunidad, Gestión y Liderazgo, Investigación y Docencia. El programa está desarrollado de manera integral, con su vinculación con la comunidad, involucrado en la Salud Pública e investigación clínica”.Universidad de Valparaíso | Javier Espinal |
Universidad de Chile | Alejandro Villalobos |
Universidad Austral | Diego Fernández, Marcelo Hernández |
Universidad Católica de Chile mención Niño | Javiera Brierley – Yanara Durán |
Universidad Católica de Chile mención Adulto | Tatiana Pescio |
Universidad de Los Andes | Catalina García |
Universidad de la Frontera | Fabiola Silva |
Universidad Diego Portales | Paulina Velásquez |
Enlace a la grabación de la actividad: https://www.youtube.com/watch?